La producción de Biogas es una oportunidad de negocio única para empresas agro-industriales enfocadas en la optimización de procesos productivos. Surge de la necesidad de cuidar el medio ambiente de una forma rentable, generando una nueva unidad de negocio a partir de la actividad principal de la empresa, sea esta la ganadería intensiva, la producción agrícola o la industrialización de materias primas.
El Biogas es un gas compuesto básicamente por metano (CH4) entre un 55% - 70%, dióxido de carbono (CO2) y pequeñas cantidades de otros gases. Se produce por la fermentación de la materia orgánica en condiciones anaeróbicas (ausencia de oxígeno). La presencia de CO2 en su composición, disminuye su poder calorífico, por lo cual no es conveniente almacenarlo ni comprimirlo.
La planta de Biogas es una instalación diseñada para recibir diferentes tipos de sustratos orgánicos, mezclarlos e incorporarlos dentro de reactores para su tratamiento. El dimensionamiento y la configuración de los reactores varían en función de los productos a tratar, debiendo ser concebidos para cada proyecto en particular.
En la planta de Biogas se produce el ciclo natural de descomposición de forma acelerada. Dentro de estos grandes recipientes cerrados, sin aire del exterior y provisto de condiciones óptimas de temperatura y agitación, es donde las bacterias actúan degradando la materia orgánica. De aquí se obtiene Biogas y un subproducto denominado “Biofertilizante”, de excelente composición nutricional para ser aplicado directamente en los campos. El Biogas, por su parte, puede ser utilizado como único combustible en equipos de cogeneración que lo transforman en energía eléctrica y térmica. Como alternativa, el Biogas también puede ser utilizado en algún proceso térmico que requiera su combustión directa (calderas).
